Trip

Sigo experimentando con mi faceta de heroinómano, me desdoblo en quinientos mil personajes. Mis pensamientos fluyen como lo hacen, cuando pateas un hormiguero, las hormigas. La sensación de un movimiento de una sola maza a la distancia, se modifica a medida que me acerco a los conflictos. Las incontables y microscópicas partículas que arman una idea, se desgranan y es imposible contenerlas en la mano. Mi cabeza es como un puñado de arena al que trato de contener apretando la mano con toda mi fuerza, y no deja de escurrirse entre mis dedos.