Eternal sunshine of the spotless mind... The well-sung woes will soothe my pensive ghost
lunes, agosto 16, 2010
Sonidos
ya pasó el medio día,
estás moviéndote lentamente en la cama.
Abrís los ojos y una luz tenue te acaricia,
sólo quedan por delante horas de letargo.
El mundo se mueve a tu ritmo, señal de que hay paz.
Todo pasa en cámara lenta,
sentís el olor de las sábanas
y su olor en tu cuerpo,
la suavidad y calidez del algodón,
sus piernas perdidas entre telas,
su pelo estrellado en la almohada.
Los sonidos son cíclicos,
repetitivos,
constantes...
No podés dejar de percibir la continuidad,
la calidez del verano y el confort del abrigo en invierno.
Sentís todo.
La luz vuelve a acariciarte,
no te queda más que ser feliz.
sábado, junio 26, 2010
Y si...
Y si lo que pensaba se desvanece,
miro la tele y veo clichés,
veo como todo por momentos es un escenario,
un eterno desdoblamiento.
Hay una realidad con una perspectiva curva,
una visión distorsionada,
hay algo del otro lado,
un rumor opaco que nunca enmudece.
El invierno se reconforta en abrigos de algodón,
el plano sensible se expresa más de lo frecuente.
Camino otra vez los pasillos de este hospital
que desinfecta mi nariz con su perfume.
Hay algo familiar, hay miseria y tristeza,
una densa resignación que aplaca el deseo
hay paz, control, pesadez y pereza,
hay ganas de nada y deseos apagados.
Me desoriento en mis fantasmas,
me pierdo, me mareo y escribo.
Curioso, pero sigo negando como soy,
sigo olvidando repetidamente mis decisiones,
sigo acá, victima de mi mismo.
Un paso más lejos de todo, más cerca de nada.